Hoy paso a presentar orgullosamente uno de mis primeros trabajos en el ámbito, no sólo ya de Diseño Industrial, sino de coordinación de Dirección de Arte.
Historia de un Creativo Frustrado consiste en una «autobiografía autorizada» realizada para la asignatura «Procesos de Creación Artística, Audiovisual y Multimedia» en la Facultad de Bellas Artes de Granada; y finalmente se extiende a un primer prototipo del packaging de dicho producto.
Se pasará a desarrollar un poco más el concepto de diseño que MicroStudio andaba buscando con este trabajo:
«En un principio quería distanciarme de la elaboración del diseño y la coordinación gráfica del producto, así que decidí trabajar en éste proyecto en tercera persona, como si estuviera documentándome sobre un artista o creativo emergente, pero que a su vez es uno de tantos, que no destaca ni sobresale de entre los demás.»
Esta línea de diseño hizo que uno de los capítulos del libro hiciera de título de todo
el proyecto y línea a seguir. Para darle un carácter más impersonal, se creó una empresa ficticia: MicroStudio; de la que el autor, David Mingorance, era el Director de Arte.
«El packaging de la autobiografía debía trasmitir esa frustración que siente un creativo o un artista ante un lienzo en blanco, por lo que se optó por usar colores limpios como el blanco y el negro. Por otra parte, el hecho de que las letras estén en relieve y la caja que contiene el libro y el material tenga los bordes redondeados, hace que la forma tenga cierto paralelismo con las lápidas y el texto con la esquela de una tumba.»
«A pesar del lapidario título, el libro es una crítica más al estudiante que al propio profesional, dónde se deja más que clara la postura del autor: la creatividad no viene de la enseñanza, sino del la profunda ansia de conocimiento personal y de la resolución de problemas con recursos limitados.»
Bajo la marca MicroStudio, iré lanzando mis diseños más arriesgados, que van más en la línea de la estrategia artística que de producto propiamente dicho.