El «Craftech»: de la impresión 3D a fabricarte tu propio coche eléctrico.

[highlight]Si durante la Revolución Industrial la fabricación en serie fue el paradigma del diseño industrial, actualmente nos encontramos ejemplos de una vuelta a la artesanía, aprovechando los avances de la industria. [/highlight]

Este año, tras profundizar un poco más en el proceso de concepción, diseño y fabricación en el automóvil, me han resultado interesantes un par de iniciativas que -pequeños (muy pequeños) «fabricantes»- están teniendo para cubrir el sector del coche eléctrico en Europa.

Nobe, el pequeño eléctrico con aire retro.

Por un lado, Roman Muljar, fundador de la empresa estonia Nobe ha decidido diseñar, desarrollar y fabricar un pequeño vehículo eléctrico de tres ruedas con el encanto de los vehículos clásicos. Un proyecto singular porque además utiliza un 100% de material reciclado por una parte; por otra, se ha abierto una campaña de crowdsourcing internacional en la que cualquier persona del mundo puede aportar fondos para llevar este proyecto a la realidad. La campaña (a día de hoy) ha recaudado ya el 256% de los fondos que se pedían, lo cual demuestra que una propuesta como esta tiene cabida en el mercado.

Nobe es un proyecto singular porque además utiliza un 100% de material reciclado y se ha abierto una campaña de crowdsourcing internacional para llevar este proyecto a la realidad.

Un ejemplo en España, Purecars.

Aquí en España, por casualidad, me topé un día de bruces con otro caso, el de Purecars.Un caso digno de mención, pues el fundador, Carlos Rodríguez, es un profesor de educación física que se embarcó en la aventura de diseñar, desarrollar y producir su propio vehículo eléctrico desde cero. Así fue como tras invertir mucho tiempo, dinero y sobre todo pasión, consiguió fabricar, de manera artesanal un deportivo con chasis tubular, carrocería de fibra de vidrio e interiores tapizados en piel. Aunque ha construido sólo una unidad, en su web podemos ver que está abierto a producir una pequeña serie en edición limitada si su proyecto despierta el interés de futuros compradores.

Tras invertir mucho tiempo, dinero y sobre todo pasión, Carlos Rodríguez consiguió fabricar un deportivo eléctrico de manera artesanal, desde cero. Incluido el diseño y desarrollo de las baterías.

El cambio de paradigma en la industria.

La industria automovilística tiene gran tradición de fabricación de un modo prácticamente artesanal en la producción de vehículos, aunque su época de auge ya pasó. En cualquier caso, tras la revolución de la fabricación en serie de Henry Ford, el chasis o las partes mecánicas no era algo que se pudiera producir, la mayoría de las veces, en la fábrica artesanal, sino que se solían usar componentes externos. Y si se hacía de forma artesanal, se triplicaba el precio final del vehículo. Este cambio de paradigma nos hace plantearnos varias cosas: una persona, a día de hoy con mucho tesón, muchas dosis de paciencia, maña y algo de conocimiento, puede diseñar y fabricar su propio coche eléctrico en su casa. Algo impensable si contamos con los métodos de fabricación «tradicionales». Ni que decir tiene que un automóvil es uno de los productos de uso diario más complejos de proyectar, diseñar y fabricar por la cantidad de componentes y factores que interactúan entre sí.

Una persona, a día de hoy con mucho tesón, muchas dosis de paciencia, maña y algo de conocimiento, puede diseñar y fabricar su propio coche eléctrico en su casa.

El hecho de reducir la complejidad en la parte mecánica (aunque aumente en la parte tecnológica) del vehículo, hace que sea más asequible y factible el fabricar automóviles a través de pequeñas (y plausibles) iniciativas como éstas.

Esto son sólo dos ejemplos, bastante actuales que ilustran que tecnología, artesanía y autoproducción se pueden dar la mano en un proyecto tan complejo como es el diseño, desarrollo y producción de un automóvil. Seguiremos atentos a otras iniciativas que nos hagan replantearnos los «pilares básicos» de la industria y sus procesos de fabricación.


Para saber más sobre los dos ejemplos mencionados… Puedes conocer la historia completa y el desarrollo de Purecar en www.purecar.es/ La web de Nobe, con actualizaciones sobre el crowdfunding: www.mynobe.com/