


¿Se puede iniciar un movimiento de protesta contra el sistema capitalista-extractivista en un taller/residencia artística de una semana?
Inspirados por las metodologías del Diseño Especulativo y de Futuros, en el que el diseño está orientado a generar un diálogo crítico que nos permita cambiar nuestras perspectivas, cuatro desconocidos nos dimos cita en Medialab-Prado para replantearnos, a través de la imaginación y la investigación, formas alternativas de crear impacto positivo en nuestro entorno y contribuir de manera creativa a imaginar y construir nuevas realidades.

El equilibrio de las cosas, se basa en un sistema de confianza
Las investigaciones nos llevaron a textos donde descubrimos que el sistema que hemos diseñado se basa en intangibles relaciones de confianza y convenciones, cuidadosamente protegidas para el bienestar de unos pocos.
«Para Adam Smith ninguna organización social puede ignorar las leyes naturales y ser próspera. Desde la revolución industrial y la aparición de las primeras máquinas, hemos tratado de tecnificar y automatizar tanto todo, que hasta hemos modificado la propia naturaleza del ser humano. La investigación de la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones (Adam Smith, 1776) es la base del desarrollo de nuesto sistema de valores y creencias. Fieles a nuestra impaciencia por la búsqueda del beneficio inmediato hemos ignorado el principio del que parte la naturaleza de las cosas, y nos hemos quedado solamente con la parte que nos interesaba, la riqueza de las naciones.
En base a la investigación de Adam Smith hemos creado un sistema basado en la confianza (básica en la evolución del Homo Sapiens), cosa que hoy en día ya no es base de nada, y por el contrario esa confianza hay que ganársela mediante estrategias, pruebas y datos. Para mí eso no es confianza, es validación (no sé que opinará el lector). Nuestra tendencia siempre ha sido creer que un futuro más próspero se avecina. Actualmente vemos cómo esa creencia es tan solo una ilusión. Progresivamente nos estamos dando cuenta de que no somos dioses al ver como esa creencia de un futuro mejor tiene efectos secundarios, a los cuales no hemos prestado atención hasta que no nos ha quedado más remedio.
Aunque nos empeñamos en tener respuestas para todo, sabemos que realmente no las tenemos. Debido a esto, hay cosas que nos preguntamos al saber que se escapan de nuestro control y eso no nos gusta, así que sencillamente las evitamos. Como reza un vuejo refrán: no hay peor ciego que el que no quiere ver.»
Los apuntes nos muestran los pilares base de la creación de las teorías económicas, que nos da pistas para entender el contexto de la realidad actual.

Planteando incidencia política en la macroeconomía mundial desde la microacción comunitaria
Tras mapear el contexto, coincidimos en que cualquier tipo de intervención artística, si era pequeña, no iba a llegar a un volumen grande de la sociedad y nuestra investigación carecería de sentido.
Fue entonces cuando empezamos a pensar en la viralización de ideas al más puro estilo del activismo político.
¿Cómo llevar a cabo las acciones? ¿Cómo podemos «colar» ideas más allá del tiempo y el espacio en el que nos encontramos?
Una buena vía pasaba por crear un movimiento colectivo, sin una autoría concreta, en el que usar la materialización del sitema al que estamos cuestionando, a través de sus bienes, es decir, el dinero. Fue así como trabajamos en un manifiesto colectivo al que cualquier persona llegaría a través de las redes sociales (una vez más, usando un sistema alineante y basado en la recogida de y venta de datos de usuarios) que se mencionan en los propios soportes de libre circulación (los billetes).
Además, tenemos la posibilidad de seguir esos mensajes distribuídos de forma anónima, a través de la también anónima plataforma EuroBillTracker.



Cash-up es un proyecto de activismo artístico-político iniciado en el Laboratorio de la Imaginación, liderado por Stef Silva y Tomás Clavijo en el marco de la primera edición de Madblue Summit en colaboración con Medialab-Prado.
Otros espacios de divulgación del movimiento Cash-up:
Equipo promotor:
David Mingorance, David Madera, Pablo Rocha, Teresa Solís.